"Para mí es muy grato abrir el acceso a la cumbre del volcán Cotopaxi, uno de los más emblemáticos del país", dijo el ministro de Ambiente, Tarsicio Granizo, en una rueda de prensa en la que informó además que Ecuador cuenta "con un sistema de alerta temprana" para detectar si los niveles de actividad aumentan.
Asimismo, se evaluaron aspectos como el estado del glaciar, de las rutas, la cantidad de ceniza, la composición de los gases emitidos, la cantidad y distribución de grietas, entre otros.
El Ministerio del Ambiente coordinó el reinicio de actividades junto a la Secretaría de Gestión de Riesgos, el Ministerio de Turismo, el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional y la Asociación de Guías de Montaña.
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El ministerio informó que entre las acciones desarrolladas están la renovación de señalética, adecuación de facilidades turísticas y de infraestructura, inspección de rutas, implementación de un sistema de alerta temprana, apoyo y seguimiento a monitoreo de amenaza de ceniza y capacitación al personal.
Con la apertura del ascenso a la cumbre del volcán Cotopaxi, uno de los más activos del mundo, se estima que la economía de las poblaciones cercanas al área protegida se reactive así como la actividad de las diferentes prestadoras de servicios que ofertan la visita al parque.
La cumbre del volcán Cotopaxi es uno de los mayores atractivos turísticos del país y uno de los principales destinos de Sudamérica: el cráter tiene un diámetro de 800 metros de norte a sur y 650 metros de este a oeste.
En 2014 el PNG recibió a 171.672 visitantes, mientras que en 2015, hasta el mes de agosto, fueron 145.984.
Alrededor de 75% de visitantes son ecuatorianos y más de 70 operadoras cuentan con patente de operación turística para este lugar.