"Hoy Putin ha logrado prácticamente todo lo que quería en Siria. Ha ayudado a Asad a mantener el poder. Ha fortalecido la presencia militar rusa en Siria. (…) Putin incluso redujo las posibilidades de maniobra de EEUU y ha asegurado la influencia de Moscú en uno de los países estratégicamente más importantes en Oriente Medio", señala la periodista.
El mandatario ruso contribuyó a que Rusia fuera vista como una gran potencia, que a través de la mediación alcanzó un acuerdo de tregua en la parte suroeste de Siria.
Como consecuencia, "dos principales aliados de EEUU en la región —Israel y Jordania— deben ahora llevar a cabo negociaciones con Rusia sobre los asuntos más importantes para la seguridad nacional de Estados Unidos".
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Además, la periodista señala que gracias a la utilización de Siria como polígono, Rusia estimuló las exportaciones de armas.
Al mismo tiempo, teniendo en cuenta que en ciertas zonas de Siria la situación se ha estabilizado, las empresas energéticas rusas ya se preparan para restaurar la infraestructura siria.
La semana pasada Alexandr Lavréntiev, enviado especial del presidente ruso para la regulación del conflicto sirio explicó que Rusia no persigue objetivos estratégicos relacionados con permanecer en Siria.
"Nuestro objetivo es la lucha contra el terrorismo internacional, que es una amenaza para los intereses nacionales de Rusia", explicó Lavréntiev en una entrevista a la cadena Rossiya 24.
Y Rusia lo hace de manera muy exitosa, destacan muchos expertos.
