En la consulta popular participó un 78% de los 5,3 millones de habilitados, de los cuales un 92% apoyó el Sí a convertirse en un estado independiente.
El presidente del Kurdistán iraquí, Masud Barzani, convocó a esta consulta con argumentos históricos y culturales pero también coyunturales. Dijo que la invasión de EEUU a Irak en 2003 derivó en la desintegración del país como nación y por tanto la supervivencia del Kurdistán estaba en riesgo, entre otras cosas por ser una zona en disputa dadas sus importantes reservas petroleras.
"Había un proyecto de desmembrar a Irak y trocearlo. Podemos identificar tres áreas: en el norte el Kurdistán iraquí, en el suroeste los remanentes suníes (que salieron perdedores en el Irak post Sadam Hussein) y en el sureste y centro a los iraquíes árabes chiíes y muy próximos a Irán. Por lo tanto esa política de apostar al sectarismo está dando sus frutos, y los EE.UU no pueden hacerse los desentendidos de lo que ellos mismos gestaron", indicó Magana, profesora de la Cátedra Islam de la Universidad Católica del Uruguay.