El presidente de EEUU, Donald Trump, no para de condenar enérgicamente el Plan de Acción Conjunto y Completo del programa nuclear de Irán firmado por la Administración Obama y conocido como Barjam, por su acrónimo en persa. Y a pesar de que República Islámica de Irán sigue cumpliendo todos los compromisos asumidos, Teherán sigue recibiendo duras críticas por parte del mandatario estadounidense y el Departamento de Estado.
El mayor descontento está en las acciones de Irán en Siria, Irak, Líbano y Yemen y el apoyo a las organizaciones Hizbulá y Hamás. Además, Estados Unidos se pronuncia en contra de las violaciones de derechos humanos en las prisiones iraníes.
En caso de que EEUU decida salir del Barjam esto puede crear un precedente negativo para las posibles negociaciones con Corea del Norte, sostiene la politóloga.
"Es muy probable que las políticas de amenazar con sanciones a Irán continúen con la intención de que las dificultades económicas y el empeoramiento de las condiciones de vida obstaculicen la implementación de las actividades políticas iraníes en la región y podrán incrementar la insatisfacción con el régimen político existente", opina Fiódorova.
Desde su punto de vista, la salida de EEUU del pacto nuclear podría reducir las capacidades de las compañías estadounidenses de llegar al mercado iraní.
"Los riesgos de que Trump decida violar el tratado escenario son muy grandes", de acuerdo con la especialista.
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