Sirin es un dispositivo estático que no solo es capaz de crear barreras acústicas en un diámetro de 560 metros, sino que también puede transmitir comandos de voz a una distancia de más de cinco kilómetros, informa el periódico ruso Rossiyskaya Gazeta.
Este cañón acústico se utilizará para proteger las infraestructuras y las aguas del país eslavo. Además, Sirin será muy eficaz en la lucha contra distintos grupos de sabotaje submarino.
Aparte de la versión estática, la nueva arma también dispone de una modificación móvil que puede instalarse en los buques pequeños y medianos, los automóviles y los helicópteros.
Su alcance máximo llega a dos kilómetros y el mínimo ronda los 600 metros. En cuanto a su efecto, la máxima presión acústica de Sirin alcanza los 152 decibelios. Esta intensidad del sonido es bastante ruidosa. Por establecer una comparación, el motor de un avión en marcha emite 120 decibelios.