Es suficiente con mencionar que uno de cada 10 blindados sobre ruedas del mundo es obra de la Compañía de Producción Militar (VPK, por sus siglas en ruso). Hoy día, el gigante industrial produce, ensambla y brinda servicios de mantenimiento en 35 países de mundo. No obstante, el colectivo de la compañía se ha enfocado no solo en mantener los resultados alcanzados, sino en ampliar su presencia en el mercado mundial.
"A día de hoy, la empresa produce una amplia gama de vehículos blindados. Estos son los ejemplares más avanzados no solo en Rusia, sino también en el mercado global", expresó Alexandr Krasovitski, director general de VPK.
Se trata principalmente de los vehículos anfibio para la infantería de la familia BTR (BTR-80, BTR-82A/B y el nuevo BTR-87), así como los distintos modelos de los innovadores blindados Tigr, que ya se ha convertido en el principal vehículo de apoyo de las fuerzas terrestres de Rusia.
En un futuro próximo, la productora rusa tiene la intención de irrumpir en el mercado de blindados de América Latina, donde este tipo de máquinas tiene una elevada demanda. Entre las principales ventajas ante otros productores, Krasovitski subrayó el alto grado de seguridad que brindan sus vehículos, al tiempo que tienen un coste inferior a la gran mayoría de sus competidores.
A largo plazo, el directivo de VPK aspira a que las máquinas rusas ayuden a las autoridades de la región a disminuir los niveles de crimen y violencia, salvaguardando las vidas de sus ciudadanos. Como ejemplo positivo, Krasovitski recordó la tendencia que mostró Uruguay tras la adquisición de sus productos.