"Me postularé pese a unas críticas que considero infundadas", dijo en una entrevista con el periódico suizo Blick.
Schröder, quien había encabezado el SPD de 1999 a 2004, declaró a su vez que no piensa que esto haga daño al partido y prometió apoyar a Schulz en las elecciones.
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También opinó que la integración de Rusia, en particular de la energía rusa, en la economía mundial es de suma importancia y recordó que Rosneft tiene intereses considerables en Alemania, sobre todo en el este.
El jefe de Rosneft, Ígor Sechin, comunicó en junio pasado que la compañía decidió ampliar su Consejo de Directores de 9 a 11 personas.
El principal accionista de Rosneft es la empresa pública rusa Rosneftegaz (50,00000001% de las acciones), el 19,75% de las acciones pertenece a la compañía británica BP y el 19,5% a QHG Oil Ventures Pte. Ltd (llamada antes QHG Shares Pte. Ltd), una acción es propiedad del Estado en persona de Rosimúschestvo y las demás acciones de la petrolera circulan libremente en el mercado.
El tema de las sanciones antirrusas
Gerhard Schröder afirmó que las sanciones europeas y estadounidenses contra Rusia son nominales.
"Estas sanciones solo cumplen sus funciones de forma nominal", dijo en una entrevista con el periódico Blick.
A la vez, apoyó al líder del Partido Democrático Libre de Alemania (FDP), Christian Lindner, en su postura respecto al problema en torno a Crimea.
"El pueblo alemán busca relaciones racionales con Rusia y Christian Lindner lo ha entendido, la cuestión de Crimea no va a cambiar y todas las demás preguntas deben resolverse por separado", expresó.
A principios de agosto, Lindner defendió que el estatus de Crimea tenía que empezar a tratarse como permanente –y no temporal– en aras de mejorar las relaciones con Rusia.
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Las relaciones entre Moscú y Occidente sufrieron un profundo deterioro tras la reincorporación de Crimea a Rusia en marzo de 2014 en virtud de un referendo que culminó con un aplastante sí y por el conflicto armado interno en el este de Ucrania que estalló aquel mismo año.
EEUU, la Unión Europea y otros países aprobaron varios paquetes de sanciones contra Rusia, que respondió con un embargo a las importaciones agroalimentarias provenientes de esos países.