"Yo he planteado al presidente Salvador Sánchez Cerén, presidente de El Salvador, con el apoyo de los 14 países del Alba (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), que se convoque de urgencia, y de inmediato, a una cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de América Latina y el Caribe a los 33 países para atender la denuncia de Venezuela ante el intervencionismo grosero", expresó.
Maduro ofreció estas declaraciones durante su asistencia a una sesión de la Asamblea Nacional Constituyente realizada en el Palacio Federal Legislativo, en compañía de su Gabinete Ejecutivo y del alto mando militar.
De igual forma, el mandatario retó a los presidentes de Colombia, Perú, Argentina y México a que aprueben una reunión de jefes de Estado de América Latina para restituir a través del diálogo relaciones de respeto.
"No veo la razón para que ningún presidente o primer ministro se niegue, si ellos se la pasan hablando de Venezuela, ¿quieren hablar de Venezuela?, hablen conmigo, ¿quieren recibir respuestas de alguna situación de Venezuela?, estoy a la orden como jefe de Estado, jefe de Gobierno", añadió.
Maduro manifestó que si la reunión amerita dos días continuos de conversaciones a puerta cerrada "hablando de tú a tú", él está dispuesto por la paz de Venezuela y la región.
La convocatoria a esta reunión la hizo el presidente Maduro, luego de que 17 cancilleres de ese bloque se reunieran en Lima, Perú, para desconocer la Asamblea Nacional Constituyente y llamaran a una reunión de seguimiento en el marco de la sesión de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas, prevista para septiembre.
En esa reunión los participantes pidieron a la presidencia pro tempore de la CELAC y a la Unión Europea (UE) la postergación de la Cumbre CELAC-UE programada para octubre de 2017.
Diálogo con EEUU
El presidente venezolano denunció que la mayoría de las agresiones contra Venezuela son promovidas por Estados Unidos, país al que acusó de querer apoderarse de los recursos naturales de Venezuela (oro, petróleo, gas y coltán, entre otros).
No obstante, Maduro señaló que está dispuesto a abrir las puertas del diálogo con el presidente de ese país, Donald Trump, y aseguró que quiere tener relaciones de respeto con la nación norteamericana como las tiene con Rusia, China y la India.
"Al presidente Donald Trump que nos diferencian abismalmente muchas cosas, yo le digo, le planteo un camino, para que su nombre no quede machado para siempre, no subestime a Venezuela, Donald Trump, cuidado con las órdenes que está dando sobre Venezuela", advirtió.
En tal sentido, señaló que las sanciones impuestas por ese país a los funcionarios venezolanos no detendrán la Asamblea Nacional Constituyente.
"El camino de la paz tiene que ser el diálogo, el respeto, no la agresión, no la amenaza de bloqueo financiero, económico, comercial", acotó y repudió las advertencias de países de la región en las que han afirmado que harán lo posible para que a Venezuela "no se le preste ni un dólar" en organismos internacionales.
El presidente del país suramericano indicó que Donald Trump "está de manos amarradas" y el congresista Marco Rubio "le impone todas las decisiones sobre América Latina, Venezuela, Cuba, Nicaragua".
"Yo le ratifico al presidente Donald Trump mi deseo de restablecer relaciones, política de diálogo, de respeto, en términos de igualdad y por la vía de la palabra, para tener relaciones públicas, tener relaciones normales, tener relaciones inclusive de cooperación", manifestó.
La Fuerza Armada de Venezuela está preparada para responder a cualquier amenaza militar, aseguró el presidente Maduro, y expuso que "jamás se va a rendir".
"Presidente Donald Trump usted cree que Venezuela se va a rendir, si ustedes nos agredieran, nuestros ejércitos se expandirían por todos los campos de batalla (…) jamás Venezuela se va a rendir y si nos toca hacerlo con las manos saldrá nuestro Ejército a hacerlo con las armas en las manos, debe saberlo el imperio norteamericano", acotó.
En ese sentido, Maduro pidió a su canciller Jorga Arreaza iniciar las gestiones para que pueda sostener una conversación telefónica con Donald Trump.
"Si se da mi viaje a Nueva York dentro de unas tres-cuatro semanas para Naciones Unidas (quisiera) tener un encuentro con Donald Trump; si está tan interesado en Venezuela, aquí estoy yo, aquí está el jefe de su interés, Nicolás Maduro Moros, presidente constitucional, aquí está mi mano, si de mano se trata, aquí está mi palabra que la tengo", profirió el mandatario.
Oposición reconoce al CNE
Durante un discurso que se extendió por más de cuatro horas, en el que el Ejecutivo quedó subordinado a la Constituyente, el mandatario venezolano saludó que todos los partidos de oposición se inscribieran a las elecciones de gobernadores y aseguró que con ese acto reconocen al Consejo Nacional Electoral.
"Han reconocido la legitimidad del poder electoral, han reconocido la legitimidad de esta Constituyente, muy bien por la oposición venezolana", añadió.
El mandatario entregó una propuesta de ley a los asambleístas en las que se plantean condenas de entre 25 y 30 años para quienes cometan o haya cometido delitos de odio y aseguró que se haría justicia.
"Justicia con los asesinos, no importa el nombre, no importa el cargo, va a la cárcel quien mató, quien llamó a la violencia y quien llamó a la muerte, va a haber justicia severa con los asesinos, no importa el nombre", agregó.
El mandatario también entregó a la presidenta de la Asamblea Nacional Constituyente, Delcy Rodríguez, su propuesta para la redacción de una nueva Constitución.
