"La primera vez que leí la noticia me reí. Luego la volví a leer y me reí otra vez. Si esto lo hubiera publicado cualquier otro país el mundo moriría a carcajadas, pero como son los Estados Unidos de Norteamérica el mundo lo toma en serio", dijo a Sputnik Jorge Casals, exdirector del Instituto de Relaciones Internacionales de Cuba.
"No tiene ningún sentido que Cuba quiera dañar el sentido auditivo de estas personas. Con EEUU hay que tener mucho cuidado, personas con mucho poder y medios periodísticos repiten sus estupideces para conseguir intereses subyacentes", agregó.
Una declaración el 9 de agosto del ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba negó cualquier participación cubana en el maltrato a diplomáticos estadounidenses. Aún así Washington expulsó a dos diplomáticos cubanos. La Habana comentó que esta decisión fue "injustificada e infundada".
"Sin lugar a dudas hay una intencionalidad detrás de esta denuncia ridícula. EEUU tiene un no diplomático al frente del Departamento de Estado [Rex Tillerson] y un presidente [Donald Trump] que de diplomacia sabe bien poco. De esa administración se puede esperar cualquier cosa", indicó Casals.
Durante años, según CNN, los diplomáticos estadounidenses en La Habana se quejaron de sufrir hostigamiento por parte de funcionarios cubanos, como violaciones a sus automóviles y hogares. Sin embargo, tras el restablecimiento de relaciones entre Estados Unidos y Cuba en 2015, las denuncias de acoso cesaron.
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"El incidente fue en mayo y lo traen a colación recién en agosto. ¿Por qué no lo denunciaron antes? El Che [Guevara] nos alertó una vez: en el imperialismo no se puede confiar ni un tantito así, nada", concluyó el profesor cubano.
