"El hecho tendrá importantes aplicaciones en el ámbito gubernamental, militar, financiero, energético y otros en los que la seguridad es primordial", cita la agencia Xinhua al académico Pan Jianwei, uno de los físicos encargados del proyecto.
Cuando el satélite estaba a 1.200 kilómetros de la estación, la clave cuántica se distribuía con una eficacia que era trillón de veces superior a la de la fibra óptica de la misma longitud.
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La tecnología cuántica, según Pan, permite excluir del todo la intervención de las llamadas telefónicas y garantizar la seguridad en la transmisión de grandes cantidades de datos bancarios.
Las comunicaciones a través de partículas cuánticas no dejan intervenir e interceptar la información transmitida.
En mecánica cuántica, el llamado principio de incertidumbre de Heisenberg establece que el proceso de observación de una partícula subatómica altera su estado natural e impide averiguar todas sus características.
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Aplicado a la criptografía, ello significa que el proceso de creación de una clave secreta se trastorna antes de que un intruso pueda acceder a la información confidencial.
