"Diez atacantes, dos fueron abatidos por el fuego leal a la patria y uno está herido, de estos diez atacantes que quedaron en las instalaciones de Paramacay nueve son civiles y solo uno es un teniente desertor, desde hace varios meses", expresó el jefe de Estado.
Maduro aseguró durante su programa "Los Domingo con Maduro", transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión, que los capturados están colaborando "activamente" con información.
"Estos diez que se quedaron, de los cuales solo es un militar retirado, fueron abandonados por el otro grupo y huyó ante la primera reacción de las fuerzas militares que se encontraban un domingo descansando", añadió.
El grueso del personal militar de esa unidad blindada, informó el presidente, se encuentra en los Juegos Internacionales Militares Rusia 2017 "ganando medallas".
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Además, señaló que el grupo que huyó sustrajo de la base armas "en complicidad con un teniente que está identificado" y está siendo buscado.
"No puedo calificarlo de otra manera, es un ataque terrorista contra la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y la Fuerza Armada ha reaccionado unida con moral, con decisión", añadió Maduro.
El ataque a la base militar se registró luego que un grupo de 20 sujetos, vestidos con prendas de la Guardia Nacional (componente del ejército), publicaron un vídeo en el que llamaron a la población a unirse a la policía y a la fuerza armada para "restablecer el orden constitucional".
Caguaripano se identificó como comandante de la operación "David Carabobo" y aseguró que hablaba desde la número 41 Brigada Blindada de Valencia.
"Aclaramos que esto no es un golpe de Estado; esta es una acción cívica y militar para restablecer el orden constitucional, pero más aún, para salvar al país de la destrucción total, para detener los asesinatos de nuestros jóvenes y familiares", explicó Caguaripano.
El sujeto llamó a la población a ir a los cuarteles militares y a las sedes de la policía y aseguró que los funcionarios que no se unan a la población, serán considerados un objetivo.
Esto ocurre, luego que el sábado 5 de agosto la Asamblea Nacional Constituyente iniciara su actividad, con la destitución de la fiscal general, Luisa Ortega, el nombramiento en su lugar de Tarek William Saab, y la declaración de emergencia dentro del Ministerio Público.
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Además, acordaron que la constituyente se mantendrá activa por los próximos dos años.