Los negociadores mexicanos "identificaron puntos en donde podría haber conflicto entre los tres países —México, EEUU y Canadá- como la intención de eliminar el Capítulo 19 que contempla mecanismos de defensa cuando un país aplica medidas antidumping", dijo a Sputnik la directora de análisis económico financiero de Banco Base, Gabriela Siller.
"No está clara la manera en que EEUU buscará reducir su déficit comercial con México a través de modificaciones a la legislación comercial", explicó la experta.
Sin embargo, el clima en los mercados financieros mejoró luego de que tanto EEUU como México expusieron sus prioridades para comenzar la primera ronda negociadora.
No obstante, el peso mexicano comenzó a sufrir presiones y el viernes cerró con pérdidas por tercera semana consecutiva.
La sensibilidad a cualquier señal es tan grande que una conversación entre el presidente de EEUU, Donald Trump, y México afectó al peso, al conocerse que el jefe de Estado estadounidense amenazó en enero a su colega Enrique Peña Nieto con cuotas arancelaras para proteger a la economía de su país de exportaciones mexicanas.
Esta es la tercera semana consecutiva que el peso muestra pérdidas acumulando una caída de 1,82 por ciento, luego de tocar un mínimo en el año de 17,45 pesos por dólar a mediados de julio.
La moneda estadounidense terminó con una depreciación semanal de 0,60 por ciento al cierre del viernes, cotizado a 17,88 pesos por dólar.
¿Cuáles son los motivos detrás de la depreciación del peso en las últimas tres semanas?: "existe una mayor cautela debido al próximo inicio de la renegociación del TLCAN (Tratado de Libre Comercio de América del Norte)", indica Siller.
En efecto, el peso comenzó a perder terreno paulatinamente desde el 17 de julio, después de que la Oficina del Representante de Comercio de EEUU publicó el resumen de sus objetivos para el inicio de la renegociación del TLCAN.
Economías al alza
Las economías norteamericanas se perfilan al alza, en vísperas de la renegociación comercial del acuerdo que multiplicó el comercio bilateral México-EEUU un 500 por ciento en dos décadas, hasta marcar un récord de 530.000 millones de dólares en 2016.
Las autoridades de EEUU publicaron un crecimiento económico a una tasa trimestral anualizada de 2,6 por ciento durante el segundo trimestre, gracias principalmente a una expansión del consumo y de la inversión.
Asimismo, durante julio la nómina no agrícola mostró la creación de 209.000 nuevos empleos en EEUU, superando por mucho las expectativas del mercado, lo cual fue aplaudido a rabiar por Trump en sus redes sociales.
En cuanto a México, "el panorama no es negativo, aunque el peso se está viendo afectado por motivos especulativos y los buenos datos en EEUU que refuerzan al dólar".
¿Cuáles son los principales factores que se destacan del buen panorama para la economía mexicana?
"El reporte oficial de esta semana de que la economía del país latinoamericano creció a una tasa anual de 3 por ciento durante el segundo trimestre, de acuerdo a cifras ajustadas por estacionalidad, incluyen un crecimiento acelerado del sector de servicios", respondió.
Asimismo, la confianza de los consumidores mexicanos se recuperó durante julio y marcó su nivel más alto en 12 meses, acumulando cuatro meses arriba del umbral, lo cual es consistente con una expansión del consumo.
Además, la inversión fija bruta en México creció a una tasa mensual de 2,9 por ciento durante mayo, su mayor ritmo de expansión mensual desde marzo de 2015, indica la jefa de análisis la institución privada.
México recibió otra buena noticia de la agencias calificadora: el jueves Fitch Ratings se sumó a Standard & Poor"s al mejorar la nota para la deuda soberana de México "desde una negativa a una perspectiva estable".
Además, esas compañías financieras internacionales han elevado las previsiones de crecimiento para este año y 2018.
Los calificadores de riesgo anticipan un crecimiento económico para México de 2,1 por ciento en 2017, revisado al alza desde 1,4 por ciento anterior y de 2,5 por ciento en 2018, revisado al alza desde 1,9 por ciento previa.
Expectativa de México
"Hay una probabilidad de 60 de que seamos lo suficientemente capaces de concretar cosas para tener un acuerdo en principio para inicios del próximo año, lo que ya implicaría que EEUU no se levantaría de la mesa", adelantó el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, en una entrevista con una radio nacional mexicana.
Sin embargo, advirtió que "sería un error garrafal negociar el TLC con prisas", dijo al noticiario nacional Radio Fórmula.
México considera imprescindible "contar con un mecanismo de solución de controversias y mantener la protección de salvaguardas", cuya eliminación pretende EEUU.
"De acuerdo a los calendarios de aprobación previsibles, el mejor de los escenarios que pudiéramos tener (…) es que tendríamos el inicio de la implementación hasta prácticamente finales de 2018 o principios de 2019", dijo Guajardo.
En otras palabras, no será con este Gobierno sino después de las elecciones presidenciales de julio 2018.
El éxito de la renegociación, para México, que exporta a EEUU más del 80 por ciento de sus mercancías implica "que no haya nada que reste la capacidad exportadora del país", dijo el principal responsable de la renegociación.
El TLCAN debe ser modernizarlo "con la incorporación de temas o sectores que no existían hace 20 años: el energético, las telecomunicaciones y el comercio electrónico", puntualizó.
El Tratado de Libre Comercio de América del Norte es un acuerdo firmado entre los gobiernos de Canadá, EEUU y México que entró en vigencia en enero de 1994.
