Con esta cita del filósofo esloveno Viktor Timura comienza su artículo Petr Lukes en el diario checo Parlamentni listy.
Los eslavos siempre han sido ajenos a los principios de la existencia occidentales. Sus esquemas de vida no se basan en la expansión, la agresión y el parasitismo de los recursos materiales y la riqueza natural de los pueblos esclavizados, sino en el poder de su propio trabajo, destaca Timura.
Los medios de comunicación desempeñan un papel decisivo en la formación de la opinión pública. Sin embargo, la mayoría está bajo el control de propietarios occidentales, quienes se ocupan de difundir su propaganda. Así, los medios se dedican a despreciar y denigrar todo lo eslavo, promoviendo lo occidental, señala Lukes.
"Se puede discutir mucho acerca de Rusia y los rusos. Sí, no son perfectos y cometen un montón de errores. Pero, a pesar de todo, tienen algo muy valioso —lo que otros pueblos eslavos casi han perdido-. ¡Tienen orgullo! Están orgullosos de ser rusos y eslavos. Este orgullo contradice fuertemente la mentalidad de esclavos que nos sigue imponiendo la propaganda occidental", cree el autor.
Según él, es una tontería dividir entre la gente que es del oeste y los que son del este. "De hecho, la gente solo se puede dividir en buena y no tan buena. En los que tienen más o menos valor. Es decir, aquellos que piensan y actúan en la escala de valores humanos, y los que piensan y actúan de una manera diferente, destructiva y parasitaria", recalca.
"Eslavos, ¡vamos a levantar la cabeza! ¡Respetémonos a nosotros mismos, porque si nosotros mismos no nos respetamos, nadie lo hará!", concluye el diario checo.