Mientras el Gobierno brasileño apostó a que la Cámara de Diputados no autorizara a la Corte Suprema a investigar las denuncias de corrupción en contra del presidente Michel Temer, la oposición intentó hasta el último momento lo que estuviera al alcance para aplazar la votación y ganar tiempo.
"Nuestra estrategia es impedir que la votación ocurra en este momento porque actualmente Temer tiene la mayoría comprada en el pleno. Creemos que si aplazamos la votación por una o dos semanas, nuevas denuncias pueden ser presentadas en la Justicia y muchos diputados oficialistas pueden cambiar sus posiciones", dijo a Sputnik el diputado Jean Wyllys, de Partido Socialismo y Libertad (PSOL).
"No sabemos si saldremos vencedores, pero estamos en la resistencia contra ese Gobierno corrupto y golpista", remarcó Wyllys.
Para Luciana Genro, excandidata por el PSOL a la presidencia de Brasil en las últimas elecciones nacionales, en 2014, Temer se mantendrá en su cargo pero saldrá todavía más debilitado en su gestión.
"Es el Gobierno más impopular de la historia de Brasil, pero tiene apoyo en el Congreso, de diputados que venden sus votos a cambio de cargos y de la liberación de recursos. Esa es la lógica operada por Temer, pero también ya lo era en los gobiernos anteriores. La diferencia es que con Lula y Dilma [Rousseff] había base popular, al contrario de Temer, por lo que va a tener más dificultades", consideró en diálogo con Sputnik.
La propuesta de Temer de cambiar el sistema previsional también genera mucho rechazo en la población. Si bien el proyecto ha enfrentado más resistencias en el Congreso, hay chances de que algunos tópicos sean aprobados e impliquen, por ejemplo, un aumento en la edad mínima prevista para la jubilación. "El Gobierno lo va a seguir intentando y será algo de gran perjuicio a los estratos más pobres donde se empieza a trabajar más temprano y tendrán que esperar más tiempo para jubilarse", alertó la referente del PSOL.
Por otro lado, la excandidata presidencial evaluó que "el momento más agudo" de la inestabilidad del país ya pasó. "Hay que decir que el PT [Partido de los Trabajadores] contribuyó al escenario inestable porque sus abogados también buscaron que la coalición Rousseff-Temer no fuera inhabilitada, algo que llevaría de inmediato a la caída de Temer por la vía de la Corte Electoral", indicó Genro.
La dirigente también tiene esperanzas de que nuevas denuncias surjan contra Temer y permitan que la Justicia lleve adelante las investigaciones. Sin embargo, reconoció que habrá "una probable continuación de la inestabilidad política hasta 2018", cuando el país celebrará nuevas elecciones.
"Este momento más agudo pasó, pero la crisis económica, el desempleo, las dificultades de pago a los empleados públicos provocan muchas luchas y huelgas, mucha inestabilidad. No se sabe hasta qué punto todo puede llegar porque depende de que haya nuevas denuncias y que la Justicia logre procesar al presidente Temer", concluyó.