Según el organismo, las medidas de respuesta serán "asimétricas". De acuerdo con fuentes de los círculos diplomáticos rusos, de momento, se están barajando varias opciones, como introducir sanciones personales contra los involucrados en el desarrollo de la ley, medidas económicas y trabajar activamente en diversos foros internacionales para llamar la atención sobre este problema.
En concreto, se trataría de los complejos Katín y Médnoe, donde se encuentran los monumentos dedicados a las víctimas de las represiones de Iósif Stalin. Kosachov agregó que el lugar en el que en 2010 se estrelló el avión del presidente polaco Lech Kaczynski también puede considerarse un memorial.
El experto del Instituto Ruso de Estudios Estratégicos Oleg Némenski cree que lo más racional sería responder "a nivel simbólico y de política histórica", dado que según él las acciones polacas son inmorales, pero no causan un daño directo en la política o la economía de Rusia.