Una declaración publicada en el sitio web de la Cancillería señala que el número de diplomáticos y técnicos en la Embajada de EEUU en Moscú, así como en los Consulados Generales de San Petersburgo, Ekaterimburgo y Vladivostok, deberá disminuir a 455 a partir de septiembre, para que sea idéntico al del personal acreditados en las legaciones rusas en EEUU.
"En caso de que el Gobierno estadounidense tome nuevas acciones unilaterales para reducir el número de nuestros diplomáticos en EEUU, responderemos de forma simétrica", advierte la nota.
Moscú, a pesar de la nueva ley sobre nuevas sanciones antirrusas de EEUU, hace todo lo que está a su alcance por normalizar las relaciones bilaterales con Washington, dice el comunicado.
"Es bien sabido que Rusia hizo y sigue haciendo todo lo posible para normalizar las relaciones bilaterales. desarrollar los vínculos y la cooperación con EEUU en las cuestiones más importantes de la agenda mundial, (…) partimos siempre de que los problemas mundiales solo conjuntamente pueden ser resueltos de forma efectiva", destaca el documento.
Entre los problemas más actuales de la agenda mundial se menciona "la lucha contra el terrorismo, contra la proliferación de armas de exterminio masivo, el narcotráfico, la migración ilegal y los delitos cibernéticos".
"Los recientes acontecimientos muestran que ciertos círculos de EEUU mantiene la rusofobia y la política hacia una confrontación abierta con Rusia", reza el comunicado.
Se agrega que a pesar de las continuas provocaciones de Washington Rusia "se ha comportado de manera responsable y moderada y hasta el momento no ha contestado a las más manifiestas".
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La nueva ley estadounidense que impone sanciones a Rusia es un chantaje dirigido a limitar la cooperación con Rusia que representa una amenaza para muchos países y el negocio internacional, afirmó el Ministerio ruso de Asuntos Exteriores.
"Este chantaje dirigido a limitar la cooperación de los socios extranjeros con Rusia entraña una amenaza para muchos países y el negocio internacional", expresó la Cancillería.
Las nuevas sanciones de Washington contra Moscú tienen como objetivo crear ventajas competitivas desleales para EEUU en la economía global, afirmó la Cancillería rusa.
"La nueva ley, usando instrumentos políticos, tiene como objetivo crear ventajas competitivas desleales para EEUU en la economía global", dice el comunicado.
Moscú se reserva el derecho a dar una respuesta recíproca tras la aprobación de sanciones por el Congreso de EEUU, expresó el Ministerio de Exteriores ruso en un comunicado.
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"Nos reservamos el derecho a otras medidas recíprocas que puedan afectar los intereses de EEUU", dice el documento.
El jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, sugirió en aquellas fechas expulsar de Rusia a 35 diplomáticos estadounidenses y prohibir que EEUU sigan usando una casa de campo en el noroeste de Moscú y un almacén en el sur de la capital rusa, en respuesta simétrica a Washington.
Sin embargo, el presidente Vladímir Putin anunció que el país no se rebajaría al nivel de una "diplomacia de cocina" y se reservaría el derecho a tomar contramedidas en función de la política que implementara la nueva administración estadounidense.
La ley, que debe ser firmada por el presidente, incluye nuevas restricciones a altos cargos rusos por la supuesta interferencia en las elecciones estadounidenses de 2016, acusación que Moscú desmintió en reiteradas ocasiones.
También endurece las condiciones de financiación en EEUU para las entidades rusas sujetas a las restricciones y deja la puerta abierta a las sanciones contra las compañías europeas por colaborar con Moscú en importantes proyectos relacionados con la exportación de hidrocarburos rusos.