El Tribunal rechazó la apelación de la organización religiosa y declaró competente la decisión del 20 de abril de 2017 de liquidar el Centro. De esta manera, la demanda administrativa del Ministerio de Justicia de Rusia fue satisfecha por segunda vez.
La propiedad del Centro será incautada por el Estado, y los adeptos de esta corriente se enfrentarán a cargos penales en caso de negarse a ejecutar la decisión del Tribunal.
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Anteriormente el Centro de Dirección de los Testigos de Jehová —la principal organización jurídica del grupo religioso en el país eslavo— presentó un recurso de apelación al Tribunal Supremo para revisar la decisión previa.
22 de mayo 2017, 03:50 GMT
El juicio contra la organización fue iniciado por el Ministerio de Justicia. Uno de los principales motivos de la sentencia fue la prohibición de los Testigos de Jehová de que sus miembros reciban transfusiones de sangre, lo que viola el derecho de sus seguidores para recibir ayuda médica.
Asimismo, las actividades de los Testigos de Jehová, según agregó la representante del Tribunal, generan amenazas a los derechos e intereses de la sociedad y la seguridad pública.
