La decisión del nombramiento ya está tomada pero se hará oficial hasta este martes tras la reunión semanal del Ejecutivo autonómico, según confirmaron a Sputnik fuentes del departamento de Interior del Gobierno catalán.
Por el momento las autoridades catalanas no ofrecieron explicaciones públicas sobre los motivos de esta renuncia, que llega tres días después de que tres miembros del Ejecutivo autonómico —entre ellos el responsable de Interior— renunciaran a su cargo ante la puesta en marcha del referéndum unilateral anunciado para el 1 de octubre.
El nuevo consejero de Interior, Joaquín Forn, aseguró este sábado que los Mossos d'Esquadra facilitarán la celebración del referéndum del mismo modo que el cuerpo policial facilitó todas las citas electorales acontecidas en el territorio.
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Sin embargo, Batlle —cuya trayectoria está ligada al Partido Socialista de Cataluña y no al independentismo— renegaba de las tesis del Gobierno catalán.
Según publicaron este lunes diarios catalanes como La Vanguardia o El Periódico, Batlle aseguró en un comunicado interno con motivo de su renuncia estar convencido de que los Mossos seguirán actuando con "escrupuloso respeto y sujeción a la ley".
Estas posiciones contrastan con las de su sucesor, Pere Soler, cuyo perfil de Twitter está plagado de mensajes de apoyo al proceso independentista.
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El último mensaje publicado en esa red social por el futuro director de los Mossos d'Esquadra incluye una fotografía tomada por él mismo el pasado 4 de julio en el Teatro Nacional de Cataluña durante la presentación la ley diseñada por el Ejecutivo regional para dar cobertura legal al referéndum.
Además de ser exdirector de los Servicios Penitenciarios, Soler tiene experiencia en la función pública como concejal en el barcelonés municipio de Terrasa por Convergència i Unió, partido conservador de corte nacionalista de cuya refundación nace el Partit Demòcrata Europeu Català, al que pertenece el presidente del Ejecutivo autonómico, Carles Puigdemont.
La vicepresidenta del Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, opinó este lunes que la reciente ola de dimisiones es una muestra de la "gravísima deriva" en las instituciones catalanas, donde "la gente moderada" se ve forzada a dejar su cargo.
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Por su parte, el independentismo defiende que la reorganización en las instituciones catalanas es una respuesta natural al nuevo escenario abierto tras la activación de la vía unilateral, donde se necesitará de una mayor cohesión para llevar a cabo el referéndum frente a la oposición del Gobierno central.
