"Exigimos que se garanticen los puestos de trabajo de todos los trabajadores de Pepsico", informó en un comunicado este 4 de julio el Partido de Trabajadores Socialistas (PTS), que secunda la movilización.
Los manifestantes se dirigieron primero hacia el emblemático monumento del Obelisco y cortaron la avenida 9 de julio.
Ante la llegada de Gendarmería, la protesta se trasladó frente al ministerio de Trabajo.
Según el PTS, la situación que atraviesan los trabajadores de la empresa estadounidense constituye apenas un ejemplo del deterioro general que predomina en el mercado laboral de Argentina.
"Sólo en el mes de abril hubo 50.000 puestos de trabajo menos, y en los últimos seis meses, se suman en total 212.000 desocupados, según datos oficiales", aseguraron integrantes del PTS.
La compañía, que lleva 58 años en el país, explicó que el cierre de la industria se debía "a los obstáculos inherentes a la ubicación de la planta en un área mayormente residencial, su compleja estructura de costos y extensos requerimientos logísticos".
Pepsico prometió por entonces "un trato cuidadoso a los empleados a través de una propuesta que mejora significativamente cualquier obligación legal".
La multinacional también anunció que trasladaba la producción a su central ubicada en la ciudad balnearia de Mar del Plata, también en provincia de Buenos Aires.