"Con el aumento de las inversiones, con la aceleración del consumo y las acciones que están reduciendo las tasas de interés, dentro de poco regresará de forma definitiva el crecimiento y el empleo; Brasil está caminando, a pesar de que algunos pretenden parar nuestro país", dijo Temer para añadir que "no lo conseguirán".
El presidente pronunció estas palabras en un video difundido al final de la tarde del viernes en sus redes sociales, donde repasó algunas de las acciones de Gobierno realizadas la última semana para evidenciar que el trabajo continúa, a pesar de que el país está sumido en una grave crisis política.
Citó como logros la reducción de los objetivos de la inflación para los años 2019 y 2020, así como el avance del borrador de la reforma laboral en una de las comisiones del Senado, uno de los pocos pasos que faltan para que sea aprobada posiblemente en la primera quincena de julio.
Precisamente la reforma laboral es el caballo de batalla de los sindicatos y movimientos sociales que la tarde del viernes protestaron en las principales ciudades del país alertando de la retirada de derechos que esto supondrá para los trabajadores.
Temer fue denunciado formalmente esta semana por corrupción ante el Tribunal Supremo Federal, pero en sus últimos pronunciamientos se negó a dimitir y acusó a la Fiscalía de inventar una "ficción" por acusarlo sin pruebas.