La tormenta azotará Moscú la noche del 30 de junio. Las fuertes lluvias con granizo estarán acompañadas con ráfagas de viento, cuya velocidad puede alcanzar los 20 metros por segundo. Fuertes lluvias de este tipo suelen darse en la capital rusa en el mes de junio una vez cada 5 años, subrayaron desde el centro meteorológico Fobos.
Los especialistas destacan que, a causa de la tormenta, las famosas líneas del Génesis —el primer libro de la Biblia— pueden convertirse en una real pesadilla para los residentes de la capital rusa.
"Aquel día fueron rotas todas las fuentes del grande abismo, y las cataratas de los cielos fueron abiertas, y hubo lluvia sobre la tierra cuarenta días y cuarenta noches".