"Se confirmó la absolución, el Tribunal entendió que Mermot no hizo una clara apología de la tortura", dijo a Sputnik el abogado de los denunciantes, Pablo Chargoñia.
Mermot ya había sido absuelto en primera instancia el 20 de mayo por la jueza Blanca Rieiro, y ese mismo día el fiscal Pablo Rivas anunció que apelaría el fallo.
La denuncia presentada el 24 de abril contra Mermot, actual presidente del Círculo Militar, por apología de la tortura y amenazas a la justicia, obedeció a declaraciones formuladas el 14 de abril en una rueda de prensa posterior al acto anual que realizan los militares por los "caídos en defensa de las instituciones democráticas".
En esa ocasión, Mermot dijo que no había que "confundir tortura con apremio físico; se puede dejar a una persona detenida un tiempo prudencial hasta que se canse y pueda hablar, pero eso es apremio, torturas no hay".
Los denunciantes fueron el diputado oficialista Luis Puig y Sandro Soba, hijo de Adalberto Soba, militante desaparecido durante la dictadura militar (1973-1985).
Chargoñia dijo a esta agencia que no estaba de acuerdo con la decisión del Tribunal de Apelaciones.
"Si se interpreta debidamente, Mermot sí hizo un elogio a prácticas concretas que ocurrieron en la dictadura; hay que defender la libertad de opinión, pero los discursos que trivializan la tortura deben castigarse", sostuvo el jurista.
La defensa de Mermot se basó en el derecho a la "libertad de expresión" y en el hecho de que el militar retirado "no comete apología porque no defiende la tortura; no hay adjetivos en sus declaraciones sino que hace un discernimiento de dos cosas que son diferentes", había dicho a Sputnik su abogado Andrés Ojeda.
Si bien el Tribunal entendió que no hay diferencia entre "apremio" y "tortura", como alegó Mermot, también estableció que el militar "no hizo la apología de hechos concretos calificados de cierta manera", alega la sentencia a la que accedió Sputnik.
Durante el régimen dictatorial, Mermot ocupó funciones de intendente (alcalde) interventor del departamento de Rivera (norte), de jefe de Policía de Artigas (norte) y de jefe de Policía de Montevideo.
En 1996, ya en democracia, fue comandante en jefe del Ejército y se retiró en 1997 con el grado de teniente general.