La expresidenta argentina medirá sus fuerzas ante el oficialismo y el peronismo disidente

BUENOS AIRES (Sputnik) — La expresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, confirmó su vuelta a la primera línea de la política como precandidata a senadora en la provincia de Buenos Aires de cara a unas elecciones en las que se enfrentará a otras dos ramas del peronismo y a la alianza oficialista del Gobierno de Mauricio Macri.

"Cristina ha venido a ampliar la frontera de la política, que es de los ciudadanos", alegó a Radio 10 Gabriela Cerruti, precandidata a diputada nacional en la ciudad de Buenos Aires a través de Unidad Ciudadana, la nueva fuerza de la exmandataria.

Para las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) del próximo 13 de agosto, Fernández de Kirchner acompaña su precandidatura a la Cámara alta con la del exministro de Relaciones Exteriores y diputado del Parlamento del Mercado Común del Sur (Mercosur), Jorge Taiana.

La participación de la expresidenta en esos comicios, de donde saldrán electos los postulantes definitivos para las elecciones parlamentarias del 22 de octubre, se confirmó horas antes de que el sábado a la madrugada cerrara el plazo para que los distintos partidos presentaran sus listas.

Sin haber ejercido ningún cargo público desde que fuera sucedida en su cargo el pasado 9 de diciembre por el actual mandatario, la exjefa de Estado se reserva como plato fuerte en el distrito más importante del país, la provincia de Buenos Aires, donde vive casi un tercio de los habitantes.

Al postularse por Unidad Ciudadana, Fernández de Kirchner evita una interna en el peronista Partido Justicialista (PJ), con el que fue elegida presidenta tanto ella como su fallecido esposo, el exmandatario Néstor Kirchner (2003-2007).

En el PJ, único partido que en la provincia de Buenos Aires presenta dos precandidatos, juega con fuerza en la categoría de senadores el que fuera ministro de Interior y Transportes de la expresidenta, Florencio Randazzo, frente a un rival interno casi desconocido, el jefe de gabinete de la alcaldía bonaerense de José C. Paz, Gastón Yáñez.

La tercera fuerza peronista que se presenta a las elecciones es la coalición 1País, encabezada por el líder del Frente Renovador, el diputado Sergio Massa y por la legisladora Margarita Stolbizer, aspirantes por separado en 2015 a las elecciones presidenciales que finalmente ganó Macri.

La alianza oficialista Cambiemos, por su parte, competirá en el Senado de la provincia de Buenos Aires a través del actual ministro de Educación del Gobierno, Esteban Bullrich.

La izquierda encara las elecciones dividida en varios partidos, según de qué provincia se trate. El Frente de Izquierda de los Trabajadores (FIT) es la única fuerza que se postula en la mayoría de las 24 jurisdicciones del país, mientras que otras agrupaciones, como Izquierda al Frente, Sur en Marcha y Convocatoria Abierta por Buenos Aires, abarcan menos territorio, incluso un solo distrito.

Ante este panorama, las PASO de agosto servirán como una suerte de gran encuesta nacional previa a los comicios parlamentarios, en los que se renuevan 127 escaños de los 257 escaños de la Cámara de Diputados y un tercio (24) de las bancas del Senado.

Creadas en 2009 durante el Gobierno de Fernández de Kirchner, las elecciones primarias definen qué partidos superan el 1,5 por ciento de los votos y pueden presentarse a las elecciones legislativas, y qué candidatos representarán a su partido, en el caso de que se presenten varios contrincantes, una opción descartada por la mayoría de las fuerzas.

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Las PASO, así como los comicios parlamentarios de octubre, también ayudarán a discernir cuál es el apoyo que tiene el presidente Mauricio Macri a casi dos años de haber llegado al poder.