El dron se estrelló en un área montañosa de Inje, en la provincia de Gangwon, pero un equipo de investigación que analizó su trayectoria estableció que había partido de Corea del Norte.
Estaba equipado con un motor de 50 centímetros cúbicos hecho en la República Checa, un tanque de combustible de 7,47 litros y una cámara Sony Alpha7R de apenas 400 gramos, pero con una batería cuya capacidad de 5.300 miliamperios hora, el doble en comparación con el dron de 2014.
Además del motor checo, el aparato llevaba un ordenador hecho por la canadiense MicroPilot, un receptor GPS de la suiza U-Blox, una antena GPS de la estadounidense Trimble, un receptor RC y una cámara japoneses, una batería china y un servomotor de la surcoreana HITEC RCD.
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El análisis de los registros de vuelo en el ordenador y del cronograma de vuelos preprogramado muestra que el drone despegó de Kumgang, provincia norcoreana de Kangwon, el 2 de mayo, cruzó la línea de demarcación militar, circunvoló la batería THAAD y, cuando ya estaba regresando a la base, se estrelló en las montañas de Inje, probablemente por un fallo de motor.
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El aparato voló a una velocidad de 90 km/h y a una altitud de 2,4 km.
Durante su misión, que se prolongó por cinco horas y media, tomó 555 fotos que quedaron almacenadas en la memoria de la cámara.
El sistema THAAD (por las siglas en inglés de Defensa Terminal de Área a Gran Altura) está diseñado para detectar misiles balísticos con radar terrestre e interceptarlos a una altitud de entre 40 y 150 kilómetros.
Una batería THAAD incluye un radar TPY-2 TM, seis lanzadores, 48 misiles interceptores y un punto de mando.
