El título público emitido fue por "2.750 millones de dólares estadounidenses con un cupón de interés de 7,125% y un rendimiento de 7,9%" informó el Ministerio de Finanzas en un comunicado.
México ha sido el único emisor latinoamericano en recurrir a este tipo de bonos.
El país ha realizado en total cuatro operaciones de este tipo: en 2010, colocó 1.000 millones de dólares; en 2011, otros 1.000 millones de dólares; en 2014, 1.000 libras esterlinas, y en 2015, 1.500 millones de euros, a una tasa de interés que osciló entre el 4 y el 5,7%.
Bélgica, China, Dinamarca, Irlanda, y Suecia también han lanzado estos títulos para financiarse.
"Estamos más cerca de países normales como Bélgica o México que de Venezuela, con quien el Gobierno anterior solía endeudarse a 5 años de plazo y a tasas de un 15%", indicó el Ministerio de Finanzas.
La deuda externa bruta de Argentina alcanzó en diciembre de 2016 los 192.462 millones de dólares, comunicó en su último informe de marzo el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).
Tras permanecer oficialmente en suspensión de pagos durante quince años, Argentina ingresó en los mercados internacionales en abril de 2016 después de pagar 9.300 millones de dólares a los fondos buitre.
Esos fondos financieros llevaron al país a un litigio internacional por los bonos que tenían en su poder y que no accedieron a reestructurar en los canjes de 2005 y 2010, promovidos por la anterior gestión.
Los títulos de los fondos buitre representaban apenas el 7% del total de la deuda que quedó en suspensión de pagos tras la crisis de 2001, estimada en unos 100.000 millones de dólares.