El titular participó en una reunión con los copresidentes de la Comisión Conjunta Grecorrusa de Derechos Económicos, Industriales y de Cooperación Científico-Técnica, que se celebró en la isla de Creta.
"A finales del siglo XX uno de cada cinco aviones era de producción soviética. Ahora la situación ha cambiado drásticamente: hemos logrado preservar una buena posición en la construcción de aviones de transporte, pero no en la aviación civil", profundizó el ministro.
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Sokolov apuntó que el helicóptero de transporte bimotor Mi-8 se considera el mejor helicóptero de su clase. No obstante, en el campo de la aviación civil, Rusia, por el momento, dispone de tan solo una aeronave que ha cumplido con todos los trámites y ha salido al mercado internacional: Sukhoi Superjet 100, con capacidad para un centenar de pasajeros y un alcance de hasta 4.400 kilómetros.
El proyecto ruso más reciente en aviación civil, el MC-21, "todavía no ha salido al mercado", mencionó Sokolov, pero destacó que para 2023 la empresa Aeroflot —la mayor aerolínea de Rusia y Europa— tiene planeado adquirir 100 unidades de la nueva aeronave.
El ministro enfatizó que es posible disminuir la presencia de los fabricantes extranjeros en el mercado nacional con el uso del apalancamiento financiero.
"En cuanto al mercado internacional, vamos a crear una dura competencia de precios, calidad, sostenibilidad ecológica y eficiencia energética. El tiempo dirá qué lugar podremos ocupar, pero a los países amigos les ofreceremos buenas condiciones", manifestó Sokolov.