De acuerdo con el científico, la razón principal de este fenómeno es la colisión de dos grandes cúmulos galácticos, que se encuentran en el proceso de formación de un cúmulo mayor, denominado Abell 115. Según explicó Burns, la energía liberada en el proceso es realmente gigantesca. Asimismo, la colisión genera una turbulenta capa de gas que se encuentra a más de 150 millones de grados centígrados.
"Energéticamente hablando, los eventos de fusión de cúmulos de galaxias son las explosiones más grandes en el Universo desde el Big Bang", indicó Burns, al tiempo que agregó que "no esperábamos ver gas tan caliente comprimido entre los dos cúmulos. Pensamos que esta turbulencia actúa como una enorme cuchara agitando los gases y convirtiendo la energía de movimiento de los dos cúmulos galácticos en energía térmica. Es una manifestación de esos cúmulos golpeándose uno contra el otro como si fueran dos macetas gigantes. Algo que nunca habíamos visto antes".
Para analizar las temperaturas en el interior del megacúmulo Abell 115, los investigadores desarrollaron un programa de ordenador que generó numerosos mapas térmicos para cada región del cúmulo.
Burns precisó que la presencia de regiones de gas relativamente frío alrededor de los núcleos de los cúmulos indica que esta no es la primera vez que colisionan y que probablemente hayan estado intercambiando gases desde hace mucho tiempo.
El científico también informó que el cúmulo está lanzando potentes emisiones de radio; sin embargo, todavía no se sabe si tienen algo que ver con los gases calientes presentes. "Estas radioemisiones son causadas por electrones del campo magnético del cúmulo galáctico viajando a velocidad de la luz. Claramente, algo ha energizado esos electrones y creemos que ese algo está relacionado con el proceso de colisión de ambos cúmulos", concluyó.
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