En el vídeo, el animal camina imponente sobre sus cuatro patas en dirección a la cámara mientras esta lo graba. Al final, el aligátor decidió hacer una pausa en el camino y tumbarse.
El reptil ya es conocido por los que frecuentan la zona y creen que debe de rondar los 25 años. Los que lo conocen, afirman que nunca ha mostrado signos de agresividad.