"Viene gente interesada en realizar sus eventos en sitios de América Latina. En la feria se juntan la oferta y la demanda. Los países de México hacia abajo tienen sus stands con un sistema informático donde se pre agendan reuniones. Es algo especial porque allí se concretan muchos negocios", dijo a Sputnik Sergio Baritussio, director de FIEXPO Latinoamérica.
Según Baritussio, un turista de congresos gasta entre cuatro y cinco veces más que uno convencional. Para la edición de este año se espera un aumento de un 25% de compradores, por lo que los negocios concretados se estiman en 300 millones de dólares, algunos de ellos por varios años.
"En general los consumidores de este tipo de turismo son personas o corporaciones con un alto poder adquisitivo. Se alojan en hoteles de entre cuatro y cinco estrellas, van a centros de convenciones importantes, muchas veces sus viajes están subvencionados por empresas y por eso sus gastos son muy superiores a los del turismo convencional. Para la sede es muy importante porque se produce un derrame de divisas en épocas de temporada baja. Esta gente termina moviendo la economía en muchos sentidos porque salen a restaurantes y bares, utilizan taxis, entre otros servicios", explicó el director de la Feria.
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Los países más desarrollados de América Latina en el turismo de convenciones son Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú. México, según Baritussio, es uno de los principales. De la actual edición participarán 16 países de la región: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, República Dominicana y Uruguay.
"FIEXPO surgió hace 11 años como una necesidad, en las ferias de este rubro América Latina no estaba representada. La idea es que los protagonistas sean los países de esta región. Hoy la Feria es la número uno en América Latina y la cuarta en el mundo en el rubro, solo detrás de las ferias de Frankfurt, Barcelona y Las Vegas", concluyó.
