"Condenamos decisivamente este atentado terrorista y esperamos que sus autores y ejecutores sean castigados severamente", dijo Zajárova.
Asimismo, exhortó a las autoridades de Afganistán a emprender las medidas necesarias para garantizar la seguridad de la capital y otras zonas del país.
Agregó que no hay nacionales de Rusia entre los muertos o heridos por el ataque.
"Nuestra embajada, los empleados de las organizaciones extranjeras en Afganistán mantienen contacto permanente con las autoridades y continuarán gestionando esta cuestión", afirmó.
Los explosivos fueron colocados en una cisterna de agua y detonaron cerca de la embajada de Alemania y el palacio del presidente.
En la zona se ubican también las embajadas de Japón, Irán y la India.
De momento ningún grupo reivindicó el ataque.