La Corporación de Ciencia e Industria Aeroespacial de China (CASIC), uno de los principales contratistas de defensa del Ejército del gigante asiático, reveló recientemente que su Segunda Academia, ubicada en Pekín, había fabricado un "misil de defensa aeroespacial de última generación".
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Según la propia empresa, la nueva arma es muy difícil de diseñar, por lo cual tan solo Rusia y EEUU han sido capaces de obtener algo semejante. Además, CASIC añadió que el misil puede derribar objetivos que vuelen a una altitud de decenas de kilómetros y a una velocidad diez veces mayor que la de las balas.
El consorcio divulgó la información acerca del nuevo interceptor antimisiles en un artículo publicado a principios de mayo. En el material, CASIC mencionó la contribución de los investigadores de los sistemas de control Zhang Yiqun Studio.
Wang Ya'nan, editor en jefe de la revista Aerospace Knowledge, admitió que el nuevo interceptor antimisiles utiliza las tecnologías más avanzadas, técnicas excelentes de fabricación y materiales de primera calidad. De esta manera, concluyó, el arma podrá exitosamente integrarse en el Ejército de China solo después de un gran número de pruebas.
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De acuerdo con el Ministerio de Defensa del país, China completó con éxito tres pruebas terrestres de los interceptores de misiles en 2010, 2013 y 2014. Sin embargo, por el momento se desconoce si contaron con la participación del interceptor creado por la Segunda Academia de CASIC.
