"Me enteré con profundo pesar de los numerosos muertos por el corrimiento de tierra del 29 de 2017 en la región de Uzgen de la provincia de Osh", dice el comunicado al indicar que el líder uzbejo transmitió sus "sinceras condolencias y palabras de solidaridad y apoyo a todo el pueblo kirguís y a los familiares y cercanos de los fallecidos y heridos".
El Ministerio de Emergencia de Kirguistán informó que un corrimiento de tierra sepultó siete casas, tras lo cual al menos 24 personas perdieron la vida en la aldea de Ayuu, en la provincia de Osh.
El presidente kirguís pidió tomar todas las medidas necesarias para paliar el impacto de la tragedia y ayudar a los damnificados.
Al mismo tiempo, señaló que los vecinos de Ayuu desoyeron los consejos de expertos que dos o tres días antes de la tragedia habían insistido en desalojar el área.
Las autoridades ya procedieron a la evacuación de 40 familias cuyas casas se encuentran en una zona peligrosa.
Los evacuados se albergarán con carácter provisional en tiendas de campaña desplegadas en el área.
El presidente Almazbékov promulgó en la tarde del sábado un decreto que declara el domingo, 30 de abril, día de duelo nacional en Kirguistán.
