La orden ha sido anunciada y suspendida temporalmente poco después, hasta que el titular del ministerio, Aryeh Deri, del partido ultraortodoxo Shas, la reexamine y adopte una posición final en los próximos días.
Se da la circunstancia de que Israel permite que los guías israelíes trabajen en los territorios palestinos pero en cambio apenas autoriza a un puñado de guías palestinos a que trabajen dentro de Israel, lo que condiciona a los grupos de peregrinos y les fuerza a elegir guías israelíes.
El Departamento del Control de la Frontera del ministerio del Interior de Israel ha enviado una directiva a los operadores israelíes para que exijan a los grupos de turistas y peregrinos extranjeros que se comprometan a no visitar ni pernoctar en los territorios palestinos.
En caso de que no acepten esta condición, sus solicitudes no se procesarán.
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Según el diario Haaretz, en la redacción de la directiva, que ahora está en suspenso provisionalmente, han participado los servicios secretos del Shin Bet que argumentan que "terroristas potenciales" pueden infiltrarse en los grupos de peregrinos.