"Se acordó crear un grupo de asesoría especializada para reforzar el equipo de funcionarios que analiza las investigaciones del caso", aseguraron fuentes del Supremo a medios como Folha de São Paulo.
El volumen de procesos relacionados con la Lava Jato se triplicó tras las declaraciones de los exejecutivos de Odebrecht, que salieron a la luz la semana pasada e inculparon a decenas de políticos.
Si antes el Supremo se centraba en cinco acciones penales y 37 investigaciones, ahora hay que sumar 76 nuevos casos; el número de personas investigadas ya llega a las 195, por lo que el Supremo necesitaba refuerzos.
La semana pasada Fachin divulgó la lista de políticos que debían ser investigados por estas irregularidades: ocho ministros del Gobierno de Michel Temer, 39 diputados, 24 senadores y tres gobernadores de estados de prácticamente todos los partidos del arco parlamentario.