Sorprendidos por el inusual clima, los habitantes de la ciudad se han burlado en las redes sociales de la mala suerte con la que han corrido este año.
Algunos usuarios hicieron referencia a que el fuego santo, uno de los símbolos del cristianismo ortodoxo, que fue encendido en la iglesia del Santo Sepulcro en Jerusalén, no fue lo suficientemente fuerte como para calentar a Rusia.
Por otra parte, un grupo de bromistas desconocido instaló un árbol de navidad en una de las plazas de la ciudad, mostrando así que el clima parece más acorde a la fiesta del nacimiento de Cristo que a la de su resurrección.
En ese sentido, los rusos más 'perezosos' se alegraron de no haber desarmado aún el árbol de navidad, dándole así a la Pascua un toque navideño.
Sin embargo, más allá del clima, los rusos no dudaron en disfrutar de la Pascua, una de las fiestas religiosas más importantes del país eslavo, junto a la navidad.