"Actualmente se proporciona una cantidad considerable de información operativa de que cabecillas de los grupos terroristas del Oriente Medio, que forman parte del llamado Estado Islámico, tienen intención de realizar ataques en varias regiones del mundo, en particular en Rusia", dijo Bórtnikov en una reunión del Comité Nacional Antiterrorista.
Indicó a la vez que el grueso de los grupos terroristas en Rusia lo conforman ciudadanos de la Comunidad de Estados Independientes (CEI), es decir de Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Kazajistán, Kirguistán, Moldavia, Tayikistán y Uzbekistán.
"El análisis de los datos disponibles mostró que la base de los grupos terroristas constituyen los ciudadanos de los países de la CEI que vinieron a Rusia con el flujo de la migración laboral", afirmó.
Según Bórtnikov, algunas de estas personas participaron en adiestramientos y lucharon junto con terroristas internacionales en Siria e Irak.
"Es preciso tomar medidas para incrementar la responsabilidad de los funcionarios que controlan el cumplimiento de las leyes migratorias y las estructuras empresariales que utilizan la mano de obra de migrantes", indicó.
Bórtnikov señaló que "en estas labores, a los órganos del poder deben sumarse activamente las comisiones antiterroristas locales"
El atentado terrorista en el metro de San Petersburgo reveló que las acciones de prevención antiterrorista no se corresponden íntegramente a las amenazas existentes, admitió el funcionario.
"Según arrojó la investigación llevada a cabo en el subterráneo de San Petersburgo, el trabajo llevado a cabo todavía no responde en su totalidad a los retos existentes", criticó.
No obstante, según Bórtnikov, los servicios de seguridad de Rusia impidieron 16 ataques terroristas en nueve ciudades rusas en 2016.
El alto funcionario agregó que los servicios de seguridad lograron "eliminar 46 células terroristas internacionales" en Rusia en 2016.
Para que la lucha antiterrorista sea más eficaz, señaló, es imprescindible reforzar la cooperación con los socios extranjeros, "aumentar la eficacia del intercambio de informaciones y adoptar todas las medidas necesarias para la detención de los criminales".
A fines de año pasado Bórtnikov comunicó que en total en 2016 los servicios de seguridad de Rusia previnieron "42 delitos de carácter terrorista".
El director del FSB señaló que es importante establecer medidas adicionales de control fronterizo para evitar los intentos de ingreso de terroristas a Rusia.
"Para impedir los intentos de ingreso de combatientes a Rusia es preciso prever medidas adicionales del régimen fronterizo, en los canales de entrada y salida para controlar los flujos de pasajeros en relación a los individuos sospechosos de participar en formaciones terroristas", alegó.