Poco antes de su asesinato, Voronénkov escribió una carta a un tribunal ruso en la que renunció a la ciudadanía rusa, sin embargo el investigador explicó que no fue un trámite oficial.
"Un ciudadano no puede renunciar a la ciudadanía rusa si tiene asuntos pendientes con la justicia", dijo.
Voronénkov, quien fuera diputado entre 2011 y 2016, emigró a finales de diciembre a Ucrania junto con su cónyuge, la también exparlamentaria y cantante de ópera María Maxákova.
El Comité de Investigación de Rusia sostiene que el exdiputado huyó al país vecino por temor a enfrentar cargos penales por la apropiación ilícita de un inmueble en Moscú.
La justicia rusa había emitido el 10 de febrero una orden federal de busca y captura de Voronénkov y el día 27 otra internacional.
El presidente ucraniano, Petró Poroshenko, responsabilizó inmediatamente al Gobierno ruso del asesinato.
Desde el Ministerio ruso de Exteriores destacaron que el pronunciamiento de Poroshenko "reduce a cero la posibilidad de una investigación imparcial del crimen".
