Actualmente, los dos arcos náuticos del puente, con un peso total de 10.000 toneladas, están en el ecuador de su construcción. Al mismo tiempo, prosigue la elaboración de los pilares más grandes y resistentes del puente.
Hacia la mitad del verano —en Rusia, entre los meses de junio y agosto—, los pilares subacuáticos estarán listos, mientras que a finales de agosto o septiembre —dependiendo de las condiciones climáticas-, se llevarán a cabo las operaciones marítimas más importantes y complejas a nivel tecnológico de la obra. Concretamente, se trata de la ubicación de los arcos en sistemas flotantes especiales para luego ser llevados a los canales náuticos, donde serán levantados a una altura de 35 metros.
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Estos arcos se convertirán así en el símbolo más importante del puente.
Para iniciar el transporte de estos arcos será necesario disponer de un pronóstico climático favorable que dure por lo menos 72 horas. El trabajo de instalación de estas estructuras concluirá en unos cinco o siete días.
Así, el puente de Crimea —también llamado 'la obra del siglo'—, está cada vez más cerca de hacerse realidad.
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