La fábrica, ubicada en Shanghái, será vendida a una compañía china no revelada por 630 millones de yuanes —unos 91 millones de dólares—, informó HTC, citada por medios de Taiwán.
HTC cambió su enfoque hacia la realidad virtual hace un par de años y ese sector tecnológico parece estar funcionando bien para la compañía, consideró Ubergizmo. Por esta razón, los ingresos obtenidos con la venta de la fábrica en Shanghai serán utilizados para financiar el negocio de RV de HTC.
La venta de las instalaciones, sin embargo, no afectará la producción de teléfonos, aseguró HTC.