"La brecha salarial cuando nosotros llegamos era del 50%, y ahora se encuentra en el 43%", dijo Martínez.
Mientras, la Gendarmería es una fuerza de seguridad terrestre y militarizada y la Prefectura Naval es la fuerza policial de la navegación, ambas bajo jurisdicción del Ministerio de Seguridad.
En diciembre de 2015, cuando comenzó el actual Gobierno de Mauricio Macri, se observó la necesidad de fortalecer la capacidad logística y militar de las Fuerzas Armadas, según el secretario de Estado.
Pero también había que mejorar "su ánimo y el respeto hacia las mismas", lo que exigía focalizarse "en su recuperación salarial", comentó el ministro.
"Estamos en un plan de recomposición y blanqueo para ir poniendo en condiciones los salarios de los militares", añadió.
Hasta hace poco, los miliares cobraban la mitad de sus salarios de forma no remunerativa, lo que impactaba también en su jubilación, porque se reducía en el mismo porcentaje.
"Entonces hacían juicio (contra el Estado) y lo ganaban, así que se generaba una situación litigiosa complicada", señaló Martínez.
"Nosotros ahora anunciamos un aumento, al margen de los aumentos generales del Estado nacional, que impactará cuando cobren el mes que viene", informó el ministro.
La cartera de Defensa también alienta el retiro de los coroneles con más de 38 años de servicio.
"Como antes tenían el sueldo en negro y cobraban la mitad, la tendencia era que no se retiraran; pero como ahora estamos normalizando la situación, pasan a retiro más personas", consideró.
El ministro comentó que "hemos encontrado una estructura militar casi similar a cuando existía el servicio militar obligatorio", vigente hasta 1994 y en virtud del cual la tropa estaba íntegramente formada por conscriptos.
Pero ahora, "con el 20% de los soldados que había en aquella época, tenemos los mismos rangos y equipos en cuanto a oficiales en cargos jerárquicos", lo cual constituye un desequilibrio, observó.
Presupuesto
Se trata de una asignación de 94.000 millones de pesos (6.066 millones de dólares), un 22,3% más que la de 2016.
El monto asignado para la defensa se destinará principalmente "a los aumentos salariales, a más horas de vuelo y navegación, a más horas de control de radar, a más capacitación, y a algo más de equipamiento", enumeró Martínez.
Martínez negó que el año pasado quedara sin ejecutar una partida equivalente a 284 millones de dólares, según señalaron algunos medios locales.
"La Fuerza Armada, que es la que tiene asignado el mayor presupuesto, ha ejecutado casi el 100%", aseguró.
Las únicas partidas que llegaron a fines de 2016 sin ejecutar "fueron por ejemplo las que debían implementarse en la Campaña Antártica, que es justamente a final de año", añadió el ministro.
En total, no superan los 1.000 millones de pesos (64,5 millones de dólares) los fondos que quedaron sin gastarse, dijo.
"Estamos mejorando, pero, obviamente como en todos lados, los presupuestos son finitos y las necesidades infinitas, así que uno que está en estos lugares necesita más para poder realizar una mayor gestión y tener mayores resultados", concluyó.
El Ministerio de Defensa es responsable de la logística y el mantenimiento de las 13 instalaciones, entre temporales y permanentes, que tiene el país en la Antártida para llevar a cabo sus investigaciones científicas.
