La víspera se informó que el Partido Popular por la Libertad y la Democracia (VVD) encabezado por el primer ministro holandés, Mark Rutte, ganó las elecciones legislativas al obtener 31 de los 150 escaños en el Parlamento, mientras que el Partido por la Libertad (PVV) del ultraderechista Geert Wilders obtuvo 19 escaños y empató con la Llamada Demócrata Cristiana (CDA) y el Demócratas 66 (D66).
Wilders, que abogó en particular por la retirada de los Países Bajos de la UE, ya reconoció su fracaso y declaró la disposición a formar parte del Gobierno de coalición presidido por Rutte.
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A la vez la experta resaltó que la intensa actividad de nacionalistas y populistas, así como el Brexit, hicieron pensar a muchos que los partidarios de la salida de la UE triunfarán por todas las partes.
Sin embargo, señaló, este "efecto de dominó" no funciona en la vida real.
"Sin duda, es una gran derrota para los nacionalistas de los Países Bajos y de toda la Unión Europea", destacó Arbátova.
"El primer ministro holandés mostró firmeza y determinación, lo que por supuesto resultó beneficioso para el partido gobernante", afirmó la experta.
El pasado sábado el Gobierno de los Países Bajos negó el ingreso en su territorio al ministro turco de Exteriores, Mevlut Cavusoglu, y a la ministra de Familia y Política Social, Fatma Betul Kaya.
Ankara respondió con amenazas de sanciones contra Ámsterdam, a la que calificó como "la capital del fascismo".