"Quiero subrayar que consideramos a Turquía como un socio de suma importancia y tenemos la intención de mantener un diálogo político intenso en el alto nivel", dijo Putin en una rueda de prensa tras reunirse con su homólogo turco Recep Tayyip Erdogan.
Putin informó también que, en el marco de la reunión Rusia y Turquía, aprobaron los objetivos y tareas de trabajo conjunto para el futuro.
Al comentar las relaciones bilaterales, Putin mencionó que el intercambio comercial ruso-turco en 2016 disminuyó el 32 por ciento, hecho que "no puede satisfacer ni a Rusia ni a Turquía".
Además Putin expresó la esperanza de que el proyecto de la central nuclear de Akkuyu, reciba próximamente el estatus de inversión estratégica.
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Rusia y Turquía seguirán luchando juntos contra los terroristas, afirmó el mandatario.
"Acordamos con los socios turcos seguir cooperando intensamente en la lucha contra los grupos terroristas, sobre todo, contra Daesh, al trabajar juntos en a nivel de los militares y los servicios de seguridad", dijo.
El mandatario ruso señaló que la situación en Siria permanece "complicada" por la inestabilidad y las controversias en la región.
El líder ruso confirmó también que la compañía rusa Gazprom planea comenzar este año la construcción del gasoducto Turk Stream.
Además, supuso que "al atraer a otros actores respetables, incluido EEUU, se puede contribuir de manera eficiente al fomento de la tregua y sobre este trasfondo pasar a una resolución política".