"Nuestro compromiso es cumplir la meta de 2017 y haremos lo que sea necesario, ya sea contener gastos y en el límite, aumentar impuestos", dijo el ministro de Economía y Hacienda del Gobierno, Henrique Meirelles.
En 2016 el Gobierno tuvo un déficit primario de 154.255 millones de reales (49.496 millones de dólares), el peor de la historia.
A pesar de ello, lo cierto es que el resultado estuvo dentro de los límites que se había marcado el Gobierno, de 170.500 millones de reales (54.709 millones de dólares).
En 2016 la economía brasileña se contrajo un 3,6% —en 2015 lo hizo un 3,8%—, lo que convierte este bienio en la peor recesión en la historia reciente del país.
Sin embargo, el ministro de Economía remarcó que los datos son la visión del "espejo del retrovisor", remarcando que lo peor ya pasó y que este 2017 la economía crecerá claramente, sobre todo en el último trimestre.