Durante enero de 2017, el principal motivo de deportación desde EEUU en un 85,2% de los casos fue la entrada sin papeles o sin visa, de acuerdo con los datos publicados por el diario mexicano Milenio en su portada.
El blanco de las órdenes ejecutivas de Trump que endurecieron la política migratoria, son los migrantes ilegales que cometieron delitos, pero el balance gubernamental mexicano solo reporta otro 1,8 recibidos con cargos por violencia, entre ellos violencia doméstica y peleas que no están relacionadas con el crimen organizado.
Otro grupo cometió "faltas menores como falsificación de documentos, infracciones de tránsito o sanciones administrativas" y son el 6,9%.
Ese mismo mes recién pasado, EEUU expulsó por casos de violencia a un 1,6% del total, de manera que los mexicanos deportados solo por cruzar ilegalmente la frontera fueron un 86,7%.
Trump ordenó la "limpieza" de los migrantes vinculados al crimen dentro de EEUU, y en su primer discurso al Congreso estadounidense la semana pasara, reiteró su determinación de expulsar a los extranjeros que hayan cometido delitos.
Realidad de las deportaciones
La realidad que retratan las cifras oficiales están lejos de cumplir ese enfoque del nuevo gobierno, que ha colocado en la mira a una comunidad de 35 millones de mexicanos o de familias mexicoamericanas, de las cuales se calcula que 11,5 millones están en EEUU sin papeles.
Al mismo tiempo, el gobierno saliente impulsaba una extensa reforma migratoria que quedó congelada en el Congreso, y firmó órdenes para proteger a cinco millones de migrantes, entre ellos los llamados "dreamers", o jóvenes que llegaron siendo niños, y con Trump han comenzado a ser deportados.
Sin embargo, el balance grueso es que "ocho de cada diez mexicanos fueron deportados por su estatus migratorio: no mataron, no traficaron droga ni pertenecían a una pandilla", concluye el balance obtenido por el periódico mexicano de circulación nacional.
"Solo iban por el sueño americano cuando fueron capturados, o ya trabajaban allá con ese objetivo al momento de ser detenidos, no eran 'bad' hombres", puntualiza el reporte.
Las cifras del Gobierno de México concuerdan con datos del Departamento de Seguridad Interna de EEUU (DHS en inglés), que revelan una tendencia ya establecida desde el año fiscal 2015.
Aquel año, las autoridades estadounidense arrestaron a 267.885 mexicanos por tener una situación migratoria irregular, y 242.456 fueron deportados a México por esa razón, es decir un 90,5%.
Solo 12.850 cometieron algún delito como homicidio, violación, venta de drogas o secuestro, un 5%.
De los 450,954 inmigrantes de todas las nacionalidades que fueron deportados por EEUU, un 84,78% fue por cruzar ilegalmente la frontera, y solo un 8,7% por algún delito grave.
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"Bad hombres" fue la primera frase en español utilizada por el líder republicano en uno de los debates con su rival demócrata Hillary Clinton, y desde entonces la sigue utilizando para referirse a los migrantes ilegales, sobre todo mexicanos.
