Aquí vienen los cazadores... ¿quién quiere engullir a América Latina?

A finales de febrero, el presidente saliente de Ecuador, Rafael Correa, destacó los intentos de la derecha de atentar contra la integración latinoamericana y romper los organismos impulsores de la unidad regional, como Unasur y la CELAC. ¿Quién quiere destruir estos lazos y qué objetivos persigue?

Según el mandatario, se trata de los defensores de la Alianza del Pacífico y del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP). "Cuando esta gente no puede ganar en las urnas, trata de desestabilizar Gobiernos", especificó Correa, citando como ejemplos las tentativas en Ecuador y Bolivia y los éxitos en Honduras y Paraguay, donde "Unasur reaccionó". También cabría mencionar a Brasil.

"Que los pueblos de Latinoamérica despierten y vean lo que está en juego"

Correa instó a que "los pueblos de Latinoamérica despierten y vean lo que está en juego".

Se trata, prosiguió, de "mañoserías [malas artes] de la derecha para impedir la democracia y la elección libre de nuestros pueblos".

Vamos a tratar de analizar quién los lleva a cabo y qué está detrás de sus intentos. Lo primero que viene a la mente cuando uno escucha hablar de la Alianza del Pacífico y del Tratado de Asociación Transpacífico es el poderoso Club Bilderberg. En sus declaraciones, Rafael Correa mencionó al presidente de EEUU, Donald Trump, quién sacó a su país de ese grupo y "se les derrumbó también el mito".

Para el poderoso club, la victoria de Trump y su decisión de salir del TPP cayó como una bomba. Es ampliamente conocido el poder del Bilderberg y del Consejo de Relaciones Exteriores de Rockefeller, según destaca en su blog el investigador y periodista estadounidense Jon Rappoport. "El TPP es uno de sus bebés preciosos. Quieren socavar la economía de EEUU. Es parte de su programa para allanar el camino hacia un planeta único bajo un único sistema de gestión: el imperio globalizador". 

Pero parece que sus intenciones no se limitan solo a la economía de EEUU, sino que van más allá y se extienden hacia otras regiones, como América Latina. Muchos expertos y analistas especializados en el Club Bilderberg recalcan que América Latina atrae cada vez más la atención de las élites mundiales: establecimiento de bases militares, introducción de sanciones, críticas a sus principales proyectos estratégicos y económicos realmente viables.

Rockefeller clava sus ojos en América Latina

Según subraya en su artículo el escritor y periodista Nil Nikandrov, el multimillonario David Rockefeller, uno de los fundadores del Club Bilderberg, siempre seguía de cerca los procesos revolucionarios en América Latina. Por ejemplo, Fidel Castro siempre atrajo el foco de atención de Bilderberg, que no escatimó esfuerzos en estrangular económicamente a Cuba y en tratar de eliminar el sistema socialista y a las principales figuras del Gobierno cubano.

Además, para vengarse de los países 'molestos' para EEUU, el expresidente Barack Obama seguía obedientemente las recomendaciones del Club Bilderberg. Uno de sus métodos era la unión con México. Así, en una de las reuniones con el expresidente mexicano, Felipe Calderón, Obama aseguró: "No estamos divididos por fronteras".

Ahora, el muro de Donald Trump parece haber echado por tierra todos los planes del Bilderberg.

Otro 'hervidero' de importancia primordial en América Latina es Bolivia. Su presidente, Evo Morales, ampara los intereses de los indígenas que, según Bilderberg, son naciones condenadas que estorban en la consecución de su particular El Dorado.

Petróleo y oro deciden todo

En general, se puede decir que el Club Bilderberg está activamente interesado en lo que pasa en América Latina, lo que prueban las bases militares de EEUU en la región, los ejercicios militares continuos y la guerra de información.

Aquí conviene traer a colación la pregunta: ¿por qué América Latina atrae tanta atención por parte del poderoso Club Bilderberg? La respuesta está 'bajo tierra'. Según el informe de BP de 2016, las reservas de petróleo de América del Sur y Central alcanzan los 329.200 millones de barriles, mientras que las reservas de EEUU, Canadá y México ascienden a 238.000 millones de barriles.

O, según datos oficiales de las reservas de oro mundiales de febrero de 2017 (World Official Gold Holdings 2017), las de Venezuela ascienden a 187,5 toneladas del metal precioso y las de México alcanzan las 120,5 toneladas. Perú tiene 34,7 toneladas de oro. 

Los datos hablan por sí solos y no requieren explicaciones adicionales. 

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