"Venezuela rechaza y condena enérgicamente las acciones arbitrarias y extraterritoriales cometidas por Oficina para el Control de Bienes Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés), del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos… contra el vicepresidente de la República Bolivariana de Venezuela, Tareck El Aissami", dijo la canciller Delcy Rodríguez.
La ministra venezolana leyó el comunicado desde el Palacio de Miraflores (casa de Gobierno), en una transmisión especial del canal del Estado Venezolana de Televisión.
Además, aseguró que tales acciones que "pretenden validar la asistencia vulgar e inadmisible de un derecho imperial carecen de la más mínima legalidad".
El Gobierno considera tal acción como una "grave afectación y agresión" en su contra, y asegura que constituye una "infamia" y una "grotesca mentira", que tiene como objetivo afectar la imagen de una altísima autoridad del Estado venezolano.
Esta acción, dijo la ministra, "no encuentra sustento alguno en la realidad, sino que forma parte de un entramado internacional para atentar contra una alta investidura, y el ejercicio de sus funciones".
Con respecto al vicepresidente El Aissami, la canciller se refirió a su trayectoria como ministro de Interior y Justicia, durante la gestión del expresidente Hugo Chávez (1954-2013).
"El vicepresidente (…) es un prominente experto criminólogo, reconocido por su firme combate contra el narcotráfico y el paramilitarismo colombiano, que llevó a la justicia a más de 102 capos de la droga y entregó a 21 narcotraficantes solicitados en extradición por Estados Unidos", agregó.
La Oficina de Control de Bienes Extranjeros del Departamento del Tesoro de EEUU, adoptó sanciones contra el vicepresidente de Venezuela por presuntas infracciones a las leyes antidrogas.
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Según Washington, El Aissami "juega un papel importante en el tráfico internacional de narcóticos"
Por su parte, el vicepresidente de Venezuela, Tareck El Aissami, repudió la decisión del Departamento del Tesoro y aseguró que su moral está intacta.
