"La creación de empleos puede no ocurrir, pero la destrucción de empleos es real", dijo Stiglitz en una reunión con legisladores del Congreso de México convocada por el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI, gobernante) realizada el viernes pasado cuyos detalles se desconocían.
"En consecuencia, aumentará el déficit en cuenta corriente de los EEUU, al encarecer sus exportaciones y abaratar las compras del exterior, creando el efecto contrario justamente al que pretende el mandatario estadounidense", dijo Stiglitz
Los votantes de Trump salieron de una población que gana un salario mínimo equivalente al de hace 60 años en EEUU y un salario medio comparable con aquél que se pagaba 42 años atrás, y esa misma gente encara la caída en la esperanza de vida y un gasto en cuidado de la salud que alcanza el 17% del Producto Interno Bruto de EEUU, explicó.
Esos electores esperaban soluciones de un gobierno que ofreció el cambio, como el de Barack Obama, pero enfrentaron la circunstancia de que aquellos que causaron la crisis económica de la década pasada (2009), fueron también los más beneficiados en cuanto la economía comenzó a corregir el rumbo, sostuvo.
Sobre los esfuerzos de Trump de retornar inversiones de la industria automotriz desde México a EEUU, comentó que ese sector llegó a pagar 45 dólares por hora de trabajo, pero hoy paga solo 15 dólares, "eso no aumentará el estándar de vida de los estadounidenses", advirtió Stiglitz.
Finalmente, señaló que el impuesto fronterizo, con arancel de 20% a las importaciones procedentes de México, "es regresar a un mundo previo a la Gran Depresión de 1929", puntualizó.