Los científicos se basaron en el vuelo de un colibrí para la creación de su invento. Estas pequeñas aves son capaces de alcanzar velocidades de hasta 80 km/h al mover sus alas hasta 100 veces por segundo. Esperando imitar el mismo principio, los especialistas construyeron un nuevo tipo de aspas para los aerogeneradores.
La longitud de cada una de las dos 'alas' es de 1,6 metros y su amplitud de movimiento alcanza los 3,6 metros; de esta manera, la potencia de cada aerogenerador es de 1 kilovatio. El moderno dispositivo ocupa poco espacio y produce poco ruido, lo que permitiría instalarlo en terrenos más pequeños y cercanos a zonas residenciales.
La energía eólica gana terreno en diferentes países del mundo como una fuente de energía limpia para los hogares e incluso para las industrias. Así, en Rusia, un país no exactamente conocido por su potencial eólico, las tecnologías de este tipo también atraen la atención y el interés de científicos e inversores.
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— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 12 июля 2016 г.
