Trump afirmó en una entrevista a la cadena televisiva estadounidense ABC News que la tortura "funciona", y se volvió a mostrar partidario de métodos como el ahogamiento simulado (waterboarding) para interrogar a sospoechosos de terrorismo.
Según la jurista, la tortura contraviene el derecho internacional, que a través de sus organismos "fiscaliza estas conductas para contribuir a la paz mundial", por lo que los dichos "delirantes" del republicano serían "extremadamente peligrosos" en estos momentos.
"Trump está haciendo declaraciones provocadoras para la conciencia civilizada de la humanidad, que favorecen la violencia, favorecen el terrorismo; no lo anula, no le pone fin, sino que lo propicia", enfatizó.
Ante esto, subrayó que "la sociedad civil ya está mostrando su repudio" y que América Latina debe estrechar vínculos y generar instancias de integración, para hacer frente a las políticas extremistas del conservador.
La última dictadura chilena a manos de Pinochet fue responsable de innumerables torturas a civiles que hasta hoy son denunciadas en tribunales locales e internacionales.