Una fuente próxima a Christopher Steele afirma que este antiguo oficial del servicio de inteligencia británico MI6 estaba "horrorizado" cuando se reveló su nacionalidad y ahora siente "terrible miedo por su propia seguridad y la de su familia".
"No estoy seguro de adónde se fue ni cómo contactarlo", apuntó el vecino al que Steele había pedido que cuidara de su gato porque se iría por unos días.
En el MI6 Steele trabajó como experto en Rusia durante un par de décadas y fue enviado a Moscú como espía en 1990.
Después de dejar el servicio secreto, instituyó en 2009 la empresa Orbis Business Intelligence con un socio llamado Christopher Burrows´.
El portal BuzzFeed publicó el 10 de enero un informe sin confirmar, según el cual Rusia llevaba años "cultivando, apoyando y ayudando" a Trump, además de recopilar datos comprometedores sobre su persona.
Trump calificó la noticia de "falsa" y dijo que sus oponentes buscan menospreciar así su victoria en las elecciones de 2016.
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Por su parte, el Kremlin también negó tener informaciones comprometedoras sobre Trump, tachando de absolutamente falsas las declaraciones a este respecto.
